Bichito

Otra vez tanto tiempo...

Decir que entre una y otra cosa no he tenido tiempo para escribir son sólo excusas. La verdad es que mi mente está hecha un torbellino y cuando anda así el ponerme a escribir se vuelve un tanto peligroso, no tanto porque escriba puras "cabeza de pescado", si no que no mido las consecuencias, ¿ a qué me refiero con eso?, a que puedo revelar más de mi misma que lo que normalmente haría. Ya sé que uno debe ser abierta (al menos eso dicen), pero en mi eso cuesta y mucho.

Aún no sé de qué parte de la familia saqué esa veta un tanto "autista", esa que sólo habla ( o escribe) de sus problemas o elucubraciones mentales una vez que tiene resuelto el dilema o , al menos, en camino de hacerlo.

Quizás todos, de una u otra forma escondemos nuestros sentimientos, lo que pasa por nuestra mente, ya que quien sepa de ellos tiene un "arma" para herirnos, para poder utilizarla en contra de uno en el momento menos pensado o quizás, es sólo paranoia de mi parte y esa es una "idea" que algún día (años atrás) se metió en mi loca mente e hizo que actuara así. La cosa es que , quiera o no, evito escribir cuando ando hecha un lío.

¿Acaso ya no tengo remolinos en mi cabeza?, la verdad es que aún están, pero esta noche me encontré con gente que hizo que el "bichito escritor" apareciera, que lo sintiera, que fuera más fuerte que el deseo de permanecer oculta , sin escribir, en espera de estar mejor. Y he descubierto algo : que cuando estoy bien, no tengo deseos de escribir, porque, obvio, quiero disfrutar el momento y cuando ando mal, ardo en deseos de tener un papel ( o un teclado) al frente para poder desahogarme y no lo hago por la tonta manía de no descubrirme, de que no "vean" como es mi interior, de dar "herramientas" para que me hieran.

Una soberana estupidez ¿verdad?, no son los "otros" quienes me hieren, soy yo la que lo hago al alejarme, al recluirme, al no darme la licencia de liberar mi interior y con ello conocerme más, aprender más, a crecer y también a compartir, pues ¿quién sabe? en una de esas alguien sonríe al leerme y eso ya es un gran logro.

El Bichito está aquí y espero que me siga "picando" con fuerzas, que me de urticaria con él, para así entregarme al placer de escribir, a la dicha de "tirar" mis pensamientos a la red, de descubrirme y desahogarme, pues, aunque no ponga en letras mis conflictos, aunque nadie se entere de qué diantres me pasa, el sólo hecho de escribir es un alivio y llena mi alma de calor.